sábado, 26 de mayo de 2018

LA CIENTIFICACIÓN DEL AMOR. EL AMOR EN LA CIENCIA. Michel Odent

Sigo estudiando para el examen de IBCLC (Consultora Internacional Certificada de Lactancia), y continúo con Odent.
Es una buena continuación a El bebé es un mamífero.
El libro resulta otro viaje a través de la vida del hombre, de su relación (y similitud) con otros animales. Cómo son las mismas las hormonas que en los mamíferos garantizan el vínculo madre-cría. Cómo nuestro cerebro racional e inteligente nos es un estorbo en algunas de las funciones vitales (en esta punto me apetece citar su ejemplo, hacia el final del libro, de la mejor lectura para entender el parto, y es que habla de la biblia, con ese pecado original (el conocimiento), que nos acarreará parir con dolor y cómo María entra en estado místico regresando al instinto más animal, más mamífero,  para su parto).
Aquí Odent no habla sólo del vínculo, el parto y la maternidad-paternidad; nos ilustra con TODO lo que implica el AMOR, y cómo muchísimos científicos han ido descubriendo pequeñas facetas del mismo. Al principio del libro nos dice que antes teníamos un gran pedazo de cristal poco pulido, pero un todo, y que la ciencia va puliéndole las caras, pero separándolo de esa totalidad. Cuanto más sabemos, vemos el fragmento más nítido, pero también más descontextualizado.

Un agradable paseo por las culturas, las creencias y la evolución, con sus conexiones con la ciencia, que unas veces nos ha separado de la realidad humana-mamífera, y otras ha servido para entendernos mejor.

Un libro para paladear mientras te cuestionas las influencias culturales que te han llegado, las que tú dejarás y las que te gustaría conseguir. El libro acaba: "La mutación no genética del Homo, iniciada por la necesidad, la razón y el conocimiento científica, no es una utopía". Justo como he acabado yo.

sábado, 5 de mayo de 2018

EL BEBÉ ES UN MAMÍFERO. Michel Odent

Estoy preparando un examen, el IBCLC (International Board Certified Lactation Consultant), será en octubre, y como no hay prisa, estoy quitando el polvo a los libros de la estantería de lactancia.
También daré una mini-charla sobre el código de comercialización de sucedáneos de leche materna y, en el pequeño apunte histórico, nombraré a Michel Odent, el precursor del parto humanizado en Europa.
Este es mi pequeño librito de 90 páginas, de 2005, que veo por las redes que va por la 6ª edición.
Es un libro de fácil lectura (el mío con algún error en la traducción y en tipaje) con una vastísima cantidad de conocimientos para tener tan pocas páginas.
Comienza por el principio, esa manera de parir en nuestra sociedad, tan distinta a lo necesario como mamífero que somos: las salas de parto no se caracterizan por la penumbra ni la comodidad, por el silencio ni la intimidad.
Nos ponemos en situación con nuestros 2 cerebros, el primitivo (maduro al nacer, el que secreta las hormonas que aseguran la supervivencia) y el nuevo (neocórtex), el que se encarga de la ciencia. La dicotomía emocional-racional que nos lleva a frenar procesos fisiológicos como el parto por sobreponer la convención, aunque también a fracasar procesos intelectuales (como un examen) por la carga emocional. Se nos genera la necesidad de equilibrio. Y Odent recuerda que el arte precisamente se creó para unir intelecto y emoción. Nos explica que hay lugares de parto donde las embarazadas cantan.
Avanzamos y, tras el parto, la intromisión continúa, y en muchas civilizaciones se priva a la madre y al bebé del contacto íntimo y necesario que establecerá el vínculo. Llama a la revolución calostral (reivindicar el poder del calostro), que asegure vínculo y lactancia, protección de los bebés, promotor de oxitocina (que induce el altruísmo), niveles de prolactina mayores en nuestras mujeres...

Me encantó, un libro que te lleva a vista de pájaro por la fisiología, la antropología, la sociología... y con sus 90 páginas de deja con ganas de más.