viernes, 18 de octubre de 2013

EL HOMBRE DE MIMBRE. PEDRO PAZ, BLANCA MIOSI, ALBA FERRARA, ANTONIO SANTOS, FÉLIX JAIME, ALLAN FERGUSSON, RAFAEL HERNÁNDEZ

Este libro de relatos lo compré en amazon me parece que gracias al Espejo de la entrada. Y diría que ha sido una experiencia (como son relatos de misterio, intriga, suspense..., pues no es digo cómo ha sido esa experiencia).
En los relatos siempre es difícil o incluso imposible hacer un resumen, así que lo voy a intentar con la fórmula con la que probé los posts de Lo mucho aprendido.

Resumen: Fantasmas que enamoran robándote el alma, fantasmas que acusan a su asesino, jugar con la muerte, jugar a la muerte, desear muerte, causar muerte o ser muerte. Y no poder llorar la muerte.

Impresiones:
Tras el misterio que espero haber generado con el resumen, os diré que mis impresiones han sido favorables.
Comenzando por un prólogo con el que te sientes un niño grande de campamento, a la lumbre del fuego tras la cena, escuchando y sintiendo cuentos. Qué bonita expresión esa: mientras nos de miedo la oscuridad el relato no podrá morir.
Si cuando leemos buscamos sentir, todos estos relatos consiguen su cometido. Pues ninguno te deja indiferente. Concretamente a mí me han dejado con ese escalofrío recorriéndome la columna.
Quitando el relato de ciencia ficción futurista y el de los zombies, los demás son relatos de suspense donde la mente, dueña de las realidades de cada uno, es protagonista innegable. Vemos la mente que hace que te enamores de una fotografía y que dicha imagen te posea, se haga dueña de tu mente; esa mente que genera al fantasma poderoso. Nos muestra el ganar creyéndote poseedor de un as escondido, y acabar sabiéndote ganador legal, pero a costa de haberte jugado la vida, de haberla podido perder.
Hay la mente capaz de creerse poderosa en cuanto al cumplimiento de lo que desea, cargando toda una vida con esa culpa. Y también podemos ver a la mente que es capaz de quedar anulada si dejamos de oírla.

Conclusiones: Misterio y suspense en pequeñas dosis para los corazones sensibles.

No hay comentarios:

Publicar un comentario